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El Real Madrid volvió a demostrar que está en un gran estado de forma. Los blancos firmaron una goleada histórica ante el Malmö, cerraron invictos una fase de grupos en la que ganaron todos los partidos de casa por tercera temporada seguida y ya acumulan cinco victorias oficiales consecutivas. Además, Cristiano Ronaldo volvió a firmar un nuevo récord al convertirse en el jugador que marca más goles en una fase de grupos de la Champions League (11).
Como ocurriera el pasado sábado ante el Getafe, los madridistas, que volvieron a salir a un ritmo trepidante, decidieron el encuentro en una primera mitad en la que brilló de nuevo Benzema. Tan sólo necesitaron 12 minutos para adelantarse en el marcador. Cristiano Ronaldo recibió en la banda izquierda y centró. Isco remató y el rechazo de Wiland fue aprovechado por Benzema para marcar a placer. La intensidad de los locales seguía siendo altísima y nueve minutos más tarde ampliaron distancias. Fue de nuevo Cristiano Ronaldo el que centró y Benzema el que llevó el balón a la red, esta vez con un precioso testarazo. Segundo partido consecutivo en el que el francés, que ya es el décimo máximo goleador en la historia de la Copa de Europa (46), firma un doblete en menos de media hora. Poco más se le podía pedir a los blancos, que seguían buscando ampliar su cuenta goleadora. Lo hicieron en el 39’, en un excelente lanzamiento lateral de falta de Cristiano Ronaldo, aunque el tanto pudo llegar dos minutos antes. Excelente pase entre líneas de Casemiro y Wiland estuvo muy acertado en el mano a mano con el portugués. En el rechazo, el remate de cabeza del brasileño fue despejado por Yotún sobre la línea de gol.
Mejor no pudo comenzar la segunda mitad. Si en la primera brilló Benzema, en ésta fue Cristiano Ronaldo el que se lució. En apenas cinco minutos vimos dos goles más del luso y una prodigiosa estirada de Casilla en el mnuto 49 al potente disparo de Rodiç. Ambos los inició Danilo en la banda derecha y, en el punto de penalti, el portugués llevó el balón a la red en el 47’ y 50’, respectivamente. No sería el último tanto de Cristiano Ronaldo. El póker lo firmaría ocho minutos más tarde. La jugada fue de muy bella factura. La inició Benzema, que rodeado de dos rivales y sobre la línea de banda, se inventó un taconazo para dejar el balón a Isco. El centro del malagueño fue aprovechado por Cristiano Ronaldo para convertirse en el máximo goleador en una fase de grupos de la Champions League, con 11 dianas.
Si la primera mitad había sido buena, la segunda fue excelente y Kovacic se sumó a la fiesta en el 70’. Jesé, escorado en la banda derecha, controló, se fue de su marca y centró. Wiland despejó y el croata aprovechó el rechazo para marcar. Aún hubo tiempo para que Benzema sellara su hat-trick en el minuto 74 y cerrara una goleada histórica. La mejor de la historia de la Champions League junto a la del Liverpool de Benítez al Besiktas en 2007. El Real Madrid se divirtió sobre el césped y el público lo agradeció en las gradas del Bernabéu.
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