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El Real Madrid se estrenó en partido oficial ante su público con una espectacular goleada. Los aficionados disfrutaron desde el inicio de un completísimo partido de los blancos. Pronto, cuando sólo habían pasado dos minutos, se adelantaron los locales. James, algo escorado, controló, levantó la cabeza y puso un centro medido a la cabeza de Bale. El galés definió a la perfección desde el punto de penalti y firmó el primer tanto madridista en esta Liga.
Los blancos eran un vendaval y sólo un minuto más tarde pudieron hacer el segundo. El pase fue de nuevo de James, pero Benzema, en el mano a mano, estrelló el esférico en el cuerpo de Adán. Los locales estaban desatados y en el 5’ tuvieron una nueva oportunidad de ampliar distancias. Cristiano Ronaldo colocó el esférico con mimo a 10 metros del área y lanzó la falta con tanta potencia que el cancerbero visitante solo pudo acertar a despejar con los puños.
Poco más se le podía pedir al Real Madrid. Los blancos disfrutaban sobre el césped y el público se mostraba encantado con el espectáculo de los suyos. Los minutos transcurrían y los locales seguían buscando tomar más ventaja. Cerca estuvieron de lograrlo en el 35’. James inició el contragolpe y Cristiano Ronaldo lo continuó con un amago magistral para plantarse sólo ante Adán, que evitó de nuevo el tanto local.
Sí llegó al filo del descanso con una obra de arte de James. Parecía que el colombiano, muy escorado, iba a centrar en el lanzamiento de la falta pero sorprendió a todos al firmar en el minuto 39 un disparo de rosca tan preciso como potente que golpeó en el poste antes de entrar. Hubo tiempo incluso para que Keylor Navas se luciera en la última ocasión de la primera mitad. Rubén Castro amagó en el 42’ y el portero blanco, en una lección de reflejos, se hizo con el esférico cuando el delantero del Betis se disponía a marcar.
No pudo comenzar mejor la segunda mitad. Lo hizo igual que la primera. A los dos minutos, gol del Real Madrid. La jugada fue de fantasía. Participó prácticamente todo el equipo y el balón circuló en varias ocasiones de una banda a otra sin que ningún jugador del Betis pudiese robarlo. La asistencia fue finalmente de Bale con la derecha y Benzema llevó el balón a la red con la cabeza.
El equipo estaba lanzado y James culminó su partidazo en el 50’ con un doblete. El colombiano, que hasta ese momento había firmado una asistencia y un golazo, aprovechó el disparo de Kroos desde la frontal para, desde el punto de penalti, levantar el esférico y marcar de chilena. Se ganó los aplausos del Bernabéu.
Aún quedaba tiempo para más y Keylor Navas también se ganó la ovación de su afición al parar de forma magistral un penalti a Rubén Castro en el minuto 60. Pudo llegar el quinto gol local, pero lo evitó el poste después de una acrobática chilena de Ramos en el 78’. Era sólo un aviso porque Bale cerró la goleada en el 89’ con un brutal latigazo desde 25 metros. La violenta forma en la que el esférico golpeó en el poste antes de entrar dio aún más belleza al tanto. Inmejorable estreno en el Bernabéu antes del parón por los compromisos internacionales.
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