La Juventus y la Roma se medían en el Olímpico en el partido más atractivo e importante de esta jornada 25 en la Serie A, donde los romanos tenían la última oportunidad de recortarle puntos a la Vecchia Signora de cara a la lucha por el Scudetto pero, sin embargo, el cuadro de Massimiliano Allegri volvió a demostrar la enorme superioridad que posee sobre el resto de equipos del calcio italiano, y fue el que llevó la manija del partido desde el inicio.
La primera parte tan solo contó con ocasiones juventinas. Vidal, Morata y Manolas, que estuvo a punto de marcarse en propia un contraataque bien llevado de los bianconeri, probaron la meta de De Sanctis, que respondió con oficio y evitó que los turineses no se marcharan a los vestuarios por delante en el marcador.
Rudi García no movió el esquema, y la segunda parte comenzó con los mismos derroteros, y de nuevo con Vidal poniendo en apuros al arquero giallorosso, que vio como un disparo del chileno se marchaba pegado al poste. El partido se rompería en el 60', cuando Torosidis, que ya estaba amonestado, derribaba a Vidal, que llegaba como un avión desde atrás aprovechando un buen pase de Carlitos Tévez. Sería el 'Apache' el que lanzara la falta, y lo hizo de forma magistral, poniendo la pelota en la mismísima escuadra y poniendo el 0-1 en el electrónico.
El gol visitante despertó, aunque tarde a los romanos, que se marcharon a la carga a tumba abierta. Pocos minutos después del gol, Kostas Manolas remató una falta botada desde el centro del campo, pero Gianluigi Buffon despejó con reflejos y evitó el primer aviso de los locales. Sería en el minuto 78 cuando, en una falta botada desde el costado diestro, lo remataba Seydou Keyta en el segundo palo para hacer el 1-1 y desatar la alegría de un Olimpico que aún creía en la remontada. Sin embargo, el partido volvió a enfriarse y Allegri se llevó el botín que buscaba, no ver como la Roma le recortaba puntos en la tabla.
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