Genialidad de Pirlo para obtener los tres puntos

Era esperado y hasta normal que la Juventus sufriera y mucho en el Marassi, pero lo que quizás sorprende especialmente es que el Genoa ni siquiera sufriera por las ofensivas bianconere en prácticamente ningún instante del partido. No mereció llevarse los tres puntos de la Liguria y mucho menos se mereció perder un muy digno Genoa, que tuvo la victoria en las botas de Emanuele Calaiò. Pero apareció el mago Andrea Pirlo para clavar una falta en la escuadra de Mattia Perin en el minuto 89 y sentenciar prácticamente la Serie A.

Tuvo dos ocasiones realmente claras la Juve, y las dos acabaron en gol, ambos anulados por fuera de juego de Dani Osvaldo. El primero de ellos llegó tras un rebote en su propio compañero, Fernando Llorente, que dejaba en fuera de juego al italo-argentino. El segundo, una gran asistencia de Pogba lo dejó solo ante Perin, y su posición en este caso era más que correcta.

No fueron esas acciones las únicas polémicas trascendentes en el partido, en absoluto. De hecho, la primera parte en general tuvo como protagonista absoluto al árbitro Paolo Silvio Mazzoleni, enseñando cuatro amarillas, tres de ellas en seis minutos para el Genoa. En una de esas situaciones, pudo expulsar a Alberto Gilardino por un codazo que el delantero italiano propinó a Bonucci. Fue un primer tiempo de muy poco fútbol y muchas entradas bruscas, incontables interrupciones. Las ocasiones acabaron siendo para los rossoblu, pero no pudieron superar al recordman Buffon, que hoy ha superado a Dino Zoff, colocándose como el quinto jugador de la Juventus con más partidos, con 476.

La mayor polémica llegó mediada la segunda parte, cuando se produjeron dos acciones muy similares en cada área en una franja de unos dos minutos. En la primera, Antonelli interrumpió un centro de Llorente con la mano, pero Mazzoleni interpretó que no había voluntariedad. Pero poco después, un balón que le botó delante a Vidal golpeó en el brazo del chileno, y esa vez sí fue penalti. Calaiò, que entró sustituyendo a Gilardino, lo tiró realmente mal, y Buffon lo repelió sin problemas.

Poco se puede mencionar de los ataques de la Juventus, que está arribando a la fase más importante de la temporada a un nivel tanto físico como futbolístico bastante pobre para lo que nos tiene acostumbrados. No hay fluidez en el juego, la presión a los contrarios no es continua ni efectiva, le cuesta hacer un gol y por fases cada vez mayores de los partidos se deja dominar. Mucha culpa tiene de este flojo momento juventino el estado de forma de Pirlo, muy lejos de su mejor nivel, a pesar del enorme gol que ha supuesto los tres puntos. Hoy ha aparecido Pogba esporádicamente y Osvaldo ha llevado cierto peligro, pero poco más allá. De hecho, Vidal ha pasado casi inadvertido por Génova. Pero la pegada bianconera le ha servido para ganar, y le está sirviendo para llevarse de calle su tercer Scudetto consecutivo.

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