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El Liverpool hizo su negocio el martes en el Rhein-Neckar-Arena, venciendo 1-2 al Hoffenheim en el partido de ida de los play-offs de la Champions League. Un tiro libre de antología de Trent Alexander-Arnold y un tanto en propia meta de Havard Nordtveit pusieron la serie de cara para los reds, que enfrentarán la vuelta con dos goles como visitante y el apoyo del público de Anfield la próxima semana.
La historia pudo haber sido otra de no ser por Simon Mignolet, quien estuvo gigante para atajar un penal de Kramaric al minuto 11. La salvada del belga le dio un impulso anímico al Liverpool, que avisó con un remate de Mohamed Salah que se fue apenas desviado. Mejor puntería tuvo Alexander-Arnold, autor de un espectacular golazo de falta al minuto 35. Desde unos 27 metros, el joven lateral de 18 años celebró su primer gol con el primer equipo con un chut que entró ajustado al palo izquierdo de Baumann.
Al igual que la primera mitad, el complemento fue de ida y vuelta, con ocasiones en ambas porterías. Pero nuevamente fue el Liverpool el que mejor aprovechó las oportunidades, aumentando su ventaja a los 74’ con un centro/disparo de Milner que se desvió en Nordtveit y terminó en el fondo de la malla. El Hoffenheim no se quedó con los brazos cruzados y descontó mediante Uth a tres del final, dejando todo abierto para los 90 minutos finales de la serie.
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