Mané pinta la ciudad de rojo

El Liverpool logró un dramático y agónico triunfo 0-1 sobre el Everton con un gol de Sadio Mané en pleno tiempo de descuento para quedarse con el derbi de Merseyside. Cuando los Toffees y la mayoría del público en el Goodison Park se conformaban con un empate sin goles, apareció el suplente Daniel Sturridge en el cuarto minuto de tiempo agregado con un disparo que pegó en el poste, dejando un rebote que Mané empujó al fondo del arco para dar tres puntos de oro a los reds.

Jürgen Klopp había pronosticado una "verdadera batalla" entre ambos equipos, y así fue: luchado, trabado, algo áspero y con pocas llegadas en los respectivos arcos. Eso sí, el Liverpool tuvo una gran oportunidad para adelantarse al filo del descanso, pero Divock Origi remató desviado de cara a la valla defendida por Stekelenburg.

Poco después de reiniciarse las acciones, los reds volvieron a perdonar cuando Roberto Firmino falló en el mano a mano con el portero holandés. Stekelenburg terminaría cediendo su lugar a Joel Robles por una lesión, y el español se lució a 10 minutos del cierre con una gran estirada que frustró una nueva oportunidad para Firmino. Al final, la última sería la vencida. Tiro de Sturridge al palo que sirvió de asistencia para Mané. Una noche para sufrir, pero también para gozar.

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