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Por segundo partido consecutivo, Divock Origi apareció en los minutos finales para dar un dramático triunfo al Liverpool, esta vez un 2-0 sobre el Leeds United que clasificó a los reds a semifinales de la English Football League Cup. Ben Woodburn, promesa de la Academia de apenas 17 años, redondeó la gran victoria del martes y se convirtió en el goleador más joven de la historia del club, que ahora está a 180 minutos de avanzar a su segunda final consecutiva de la competición. Al igual que ante el Sunderland hace sólo tres días, el Liverpool se encomendó al olfato de Origi, quien a los 76’ empujó un gran centro de Trent Alexander-Arnold para romper el cero y encaminar el resultado para los reds.
Tal como había pronosticado Jürgen Klopp, el Leeds se paró firme en la cancha de Anfield e incluso pudo adelantarse en el marcador nada más comenzar el encuentro de no haber sido por Simon Mignolet, de grandes reflejos ante un peligroso remate de Sacko. Tras ese susto inicial, los locales generaron la gran mayoría de las ocasiones en ataque, sobre todo Georginio Wijnaldum, primero con un disparo de primera que Silvestre sacó con una estirada espectacular. Y cuando no fue el arquero del Leeds, fue el palo el que ahogó el grito de Gini, escupiendo un zapatazo del holandés al minuto 72.
Sin embargo, la presión del Liverpool se hizo asfixiante y nuevamente fue Origi el encargado de inclinar la balanza a su favor. Por si fuera poco, el delantero belga también fue clave en el segundo tanto, apilando marcadores en el área para luego ceder a Wijnaldum, quien dejó en posición inmejorable a Woodburn para que reventara el balón al fondo de las redes y desatara la fiesta del Liverpool.
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