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El año pasado levantó la Coppa Italia como capitán y la experiencia le gustó. Ahora Giorgio Chiellini quiere repetirla y mañana tendrá la ocasión. "Me he perdido los tres últimos meses y partidos importantes", destaca el defensa. "He sufrido y me he alegrado junto a mis compañeros desde fuera, pero con el gol del sábado he podido salir de este período desafortunado. Creemos que merecemos este trofeo, somos conscientes de la dificultad y el hecho de que se nos dé como favoritos son solo cosas que se dicen. Mañana será un partido difícil y equilibrado. Llega al final de una temporada en la que ambos equipos se han desgastado mucho y a partido único es difícil hacer pronósticos. En estas dos semanas hemos trabajado con intensidad y concentración: solo queda demostrarlo mañana sobre el campo. Sería un hecho histórico conseguir un doblete dos años consecutivos".
Con Bonucci sancionado, podría jugar Rugani por la derecha, con Barzagli en el centro de la defensa. Y Chiellini, que siempre ha manifestado su estima por su joven compañero de zaga, asegura: "Está preparado para jugar una final. Hablé de Daniele cuando todos decían que se tenía que marchar para tener minutos y siempre he pedido calma, porque la primera temporada en un equipo grande es siempre difícil. Hemos visto su progresión, cada día que pasa está más integrado y ahora está preparado para jugar un partido tan importante. Los 20 partidos que ha jugado este año con la Juve valen más como experiencia que los más de 40 del año pasado".
Los bianconeros se enfrentarán a un Milan aguerrido, que tiene en la Coppa Italia la última opción de conseguir clasificarse para Europa League. "No faltarán estímulos para nadie. Ellos salvarían su temporada, pero nuestra fortaleza siempre ha sido la de seguir ganando. Sabemos que estamos a un paso de la historia, seguimos teniendo hambre y queremos demostrarlo mañana", asegura.
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