Cerca pero no pudo ser

Nada se le puede reprochar al Real Madrid, que cerró la Liga en La Coruña con una racha histórica de 12 victorias consecutivas. En menos de media hora, los blancos resolvieron el encuentro en Riazor y cumplieron con su labor de luchar hasta el final por el título, pero no acompañó el resultado en Granada.

Desde el inicio tenían las cosas claras los madridistas. Sabían que si no ganaban no tendrían ninguna posibilidad y mandaron desde el inicio. Circulando el esférico rápido y con profundidad y robándolo con premura cuando lo tenía su rival, el Madrid no tardó en adelantarse en el marcador. Lo hizo a los siete minutos. La jugada fue made in BBC. Bale recibió escorado a la izquierda, se marchó de Manuel Pablo con una genial maniobra y centró al punto de penalti. Benzema tocó el esférico lo justo en su remate para que llegara a Cristiano Ronaldo, que llevó el esférico a la red con la pierna izquierda. Los blancos ya iban ganando y mediada la primera mitad llegó el segundo gol. Kroos sacó el córner en el 25’ y Cristiano Ronaldo remató de cabeza. El esférico golpeó en Mosquera antes de alojarse en la portería local. Eran los mejores minutos de los visitantes y el portugués seguiría siendo protagonista al encontrarse en dos ocasiones con los postes. Balón largo de Pepe en el 29’ y el luso, después de bajar el esférico, remató al palo en el mano a mano con Pletikosa. Tres minutos más tarde estrelló su disparo desde la frontal en el larguero.

Zidane sustituyó a Cristiano Ronaldo por James en el descanso. Con los deberes hechos y teniendo en cuenta que disputa la final de la Champions League en dos semanas, el Real Madrid levantó el pie del acelerador y el Deportivo se aproximó más al área visitante. Ahí fue cuando emergió la figura de Keylor Navas con dos meritorias intervenciones. En la primera, sacó con su estirada un ajustado disparo de Lucas Pérez en el minuto 54. Mucho más clara fue la ocasión que tuvo Róber en el 71’, pero su remate de cabeza a bocajarro a la salida de un córner lo rechazó el portero dando una lección de reflejos.

El Real Madrid reaccionó y en el 79’ estuvo cerca de hacer el tercero. Isco filtró un balón entre líneas, Carvajal centró y el propio centrocampista andaluz remató de cabeza, pero el balón se marchó a escasos centímetros de la portería rival. También la tuvieron Marcelo y James en el 85’ y 87’ respectivamente. El disparo del brasileño obligó a lucirse a Pletikosa y el del colombiano rozó el poste. Los blancos cumplieron en Riazor y ya piensan en la final de la Champions League ante el Atlético en Milán.

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