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martes, 8 de abril de 2014

Un pase excesivo de sufrimiento


El éxito no se alcanza sin sufrimiento y el Real Madrid se sobrepuso a las adversidades en el Signal Iduna Park para clasificarse para las semifinales de la Champions League. Todos los análisis previos coincidían en que el primer cuarto de hora sería clave y los blancos no sólo no encajaron gol sino que estuvieron cerca de hacerlo. Centro de Coentrão y el balón golpeó en la mano de Piszczek. Di María lanzó el penalti, pero Weidenfeller le adivinó el golpeo y evitó el tanto en el 17’.

El partido, que hasta ese momento estaba siendo intranscendente y sin ocasiones, se animó, más por los errores de los madridistas que por el juego de los locales, y de la pena máxima que tuvieron los blancos se pasó a una clara ocasión para los alemanes. Mkhitaryan falló a bocajarro en el punto de penalti en el 19’, pero Reus sí acertó cuatro minutos más tarde. Pepe cedió atrás de cabeza y el internacional germano, muy listo, se aprovechó para superar a Casillas y rematar a placer.

El conjunto alemán no arriesgaba
El Borussia Dortmund, pese a adelantarse en el marcador, no presionaba y se limitaba a esperar un error del Real Madrid. Y de nuevo llegó. Illarra se equivocó en la entrega del esférico y dio la posibilidad de que los alemanes iniciasen un contragolpe en el que Lewandowski estrelló el balón en el palo, pero Reus aprovechó el rechace en el 34’.

Isco sustituyó a Illarra en el descanso y la primera ocasión de la segunda parte fue para los blancos. Bale controló en la frontal, se acomodó el esférico y remató, pero el portero del conjunto alemán despejó el balón en el 48’.

La presión del Signal Iduna Park era brutal y ambos equipos tuvieron dos claras ocasiones de marcar. Muy similares. Benzema y Mkhitaryan encararon y regatearon a Weidenfeller y Casillas respectivamente, pero Hummels le arrebató el balón al francés cuando iba a disparar y el centrocampista alemán, por el contrario, se encontró con el palo en el 65’.

Dos grandes paradas de Casillas
El Borussia apretaba y creía en la remontada, pero en ese momento emergió la figura de Casillas. El capitán del Real Madrid realizó dos soberbias estiradas a los lanzamientos de Mkhitaryan y Grosskreutz. Casemiro sustituyó a Di María en el 72’ y dio aire al centro del campo.

Quedaban poco más de 15 minutos y los blancos eran conscientes de que tocaba sufrir para lograr el objetivo. Así fue. Los madridistas supieron contener las acometidas locales, estuvieron cerca de marcar en dos contragolpes que finalizaron Bale e Isco y ya esperan rival en el sorteo de este viernes en Nyon.

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