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El Liverpool volvió al triunfo y al gol el sábado con un 2-0 sobre el Milan en la mejor actuación de los reds en lo que va de la pretemporada. Los hombres de Jürgen Klopp se adueñaron de la cancha del Levi's Stadium para dejar en el olvido su caída a mediados de semana ante el Chelsea con anotaciones en el segundo tiempo de Divock Origi y Roberto FIrmino. Pero si de ganas se tratara, el Liverpool hubiera liquidado el encuentro dentro de los 45 minutos iniciales.
Los reds, que estrenaron su tercera equipación, salieron a presionar desde el arranque y se volcaron sobre el arco de Gabriel, quien pasó su primer susto nada más comenzar el encuentro. Sin embargo, Philippe Coutinho no pudo cerrar la pinza al gran centro de Sadio Mané. El mismo atacante senegalés desaprovechó la mejor ocasión del primer tiempo al rematar directo al meta brasileño con casi toda la portería a su merced. Domino sin concretar. Esa fue la tónica del primer tiempo para el Liverpool.
Todo eso cambió en el complemento, gracias a Origi, autor de una verdadera joya. Corría el minuto 59 cuando el delantero belga recortó en la frontal y soltó un remate cruzado al segundo palo, golazo y ventaja para los reds. Luego llegó el turno de Firmino, quien aprovechó un rebote que dejó un remate de Sheyi Ojo para fusilar a Gabriel y decretar el 2-0 definitivo. Pudo haber sido un triunfo más amplio, pero lo hecho por el Liverpool en su segundo encuentro de la International Champions Cup servirá de impulso para encarar el resto de la pretemporada y la campaña 2016/17.
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