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El Liverpool se medía al HJK Helsinki y cumplió con las expectativas. El conjunto red anotó dos tantos en la segunda mitad que finiquitaron un duelo que debió haberse cerrado en los primeros 45 minutos. Los de Brendan Rodgers tuvieron el control aunque la efectividad pudo pasarles factura.
La primera parte el equipo finlandés demostró mordiente e ímpetu en sus ataques pero con el paso de los minutos su físico se fue diluyendo mientras que el Liverpool mantenía el nivel para llevarse el partido sin problemas. Aguantaron los arreones reds hasta el minuto 73.
En la segunda parte, Divock Origi abrió el marcador con un tanto que dejaba ya al partido casi sentenciado ante las pocas ocasiones del Helsinki. Para más inri, Philippe Coutinho puso la puntilla con el segundo tanto que deja al Liverpool listo para batirse en la Premier League.
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