Duodécima victoria consecutiva

Llevaba un 2014 la Juventus impoluto al cien por cien. Lo ha ganado todo, también parte de los últimos partidos del año anterior y su superioridad estaba siendo aplastante sobre todos los rivales, a los que goleaba incluso sin casi inmutarse. Pero la Sampdoria estaba siendo en estas últimas temporadas el adversario más complicado al que se enfrentaba la Juventus. El curso pasado, los genoveses ganaron ambos encuentros a la Vecchia Signora y en la primera jornada de esta temporada, un único tanto de Tévez en los últimos minutos dio el primer triunfo a la Juve, una victoria muy sufrida.

Ha habido más goles, cinco más, pero no se puede decir que le haya costado menos a la Juve ganar a la Samp en Turín. Este equipo de Mihajlovic es aguerrido y competidor, además de no querer desprenderse con facilidad del balón. No tiene jugadores de una calidad excepcional, pero sí de un  buen nivel medio que, en principio, le debería valer para mantener la categoría con soltura. Por encima de todos esos jugadores está un hombre que era de la Juventus y que no encontró sitio en bianconero, y que ha elegido el estadio de su exequipo para hacer uno de sus mejores partidos de lo que va de temporada. Se llama Manolo Gabbiadini. El internacional italiano hizo sufrir constantemente tanto a los centrales juventinos como, sobre todo, a Buffon.

El resultado, 4-2, habla de un partido intensísimo en casi todo momento, especialmente en el primer tiempo. La Juventus presionaba arriba de forma continuada y más de lo mismo hacía la Sampdoria. Las ocasiones se sucedieron y los goles no tardaron en llegar. El primero lo creó Paul Pogba en un contragolpe en el que eligió el momento ideal para poner la pelota a Vidal para que el chileno rozara lo suficiente para superar a Da Costa. Poco después, Fernando Llorente remató de forma magistral un córner botado por Tévez. La calidad de la Juve se estaba imponiendo claramente a las buenas intenciones blucerchiati. Pero los genoveses se merecían un gol y llegó con un centro de Gabbiadini que Barzagli introdujo en su portería.

Sin embargo, en los dos momentos que ha marcado la Sampdoria, la Juventus ha contestado aumentando otra vez a dos goles la renta. En la primera parte todavía, Regini derribó a Vidal dentro del área y el propio centrocampista transformó el penalti. Tras la reanudación, el ritmo bajó enormemente pero la Juve sufrió y mucho en todos los balones parados hasta que el propio Gabbiadini consiguió el momentáneo 3-2. El partido se incendió de nuevo y Gabbiadini mandó un trallazo al larguero, pero el bombero Pogba se encargó de apagar el fuego con un disparo sensacional de larga distancia que se clavó en la escuadra genovesa. De ahí a los últimos minutos, el encuentro se calmó de nuevo definitivamente y la Juve se llevó su duodécimo triunfo consecutivo para mantener los ocho puntos de ventaja sobre la Roma. 

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