Misión cumplida: la Juventus derrota al Olympiacos y se clasifica para los octavos de final de la Champions. No habría hecho falta el 0-2 que los bianconeros logran en Atenas, ya que el Barcelona ha derrotado con el mismo marcador al Sporting, pero los de Allegri no miran a otros campos y sentencian con el tanto de Cuadrado en el primer tiempo y el de Bernardeschi en el segundo.
Como ya sabido, Allegri tiene que renunciar a Pjanic y Buffon, premiado antes del partido por el vicepresidente del Olympiacos, Savvas Theodoridis, pero vuelve a apostar por el 4-2-3-1, con Douglas Costa y Cuadrado a los lados de Dybala y por detrás de Higuaín. El Karaiskakis demuestra de inicio ser un estadio caliente, incluso con las ocasión de Dybala. Pero se lleva el primer revés con el 0-1 pronto, gran pase largo de Matuidi, centro de Alex Sandro y remate de Cuadrado. Es el justo premio al buen arranque bianconero. La Juve sigue dominando y está cerca del segundo, con remates de Cuadrado o Douglas Costa. No los aprovecha y está a punto de sufrir el gol del empate poco antes del descanso, pero Szczesny saca un reflejo prodigioso con el pie para desviar el remate de Djurdjevic.
El portero tiene que volver a ser protagonista tras la reanudación porque los bianconeros se muestran más imprecisos y dejan la iniciativa al Olympiacos, que goza de ocasiones con Pardo y Marin, lo que provoca que vuelva a encenderse el Karaiskakis. Entra Pjanic por Dybala y Khedira adelanta su posición, luego Rugani por Barzagli justo antes de que Ben Nabouhane tenga la ocasión más clara local, rematando a la cruceta. A cinco minutos del final, Bernardeschi entra por Cuadrado y es una decisión acertada porque realiza enseguida un gran disparo y en el último minuto marca tras una jugada individual el 0-2 definitivo. La Juventus vuela a octavos logrando su segunda victoria a domicilio en cuatro días. Una gran tarjeta de visita para el próximo encuentro ante el Inter.
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