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El Real Madrid perdió ante el Tottenham en su debut en Wembley pero sigue dependiendo de sí mismo para clasificarse para los octavos de final de la Champions League. Son cinco los puntos en los que aventaja a Borussia Dortmund y APOEL, a los que se tiene que enfrentar en las dos jornadas que restan de la fase de grupos.
Apoyándose en el aliento de su público, el Tottenham salió fuerte desde el inicio. Con una línea defensiva muy alta, el partido se jugaba a un ritmo trepidante en apenas 30 metros y Kane fue el primero en avisar con una vaselina que detuvo Casilla en el 11’. Antes de que se cumpliera la media hora se adelantó el conjunto inglés. Trippier centró desde la derecha y Dele Alli marcó un gol que no debió subir al marcador, ya que Trippier estaba en fuera de juego al recibir el balón. El tanto hizo reaccionar al campeón de Europa, que creó tres oportunidades para empatar. Casemiro tuvo la primera en el 29’ con un disparo que Lloris impidió que fuera el 1-1. Tres minutos más tarde lo intentó Cristiano Ronaldo, que se inventó una bicicleta frente a dos defensas y posteriormente un disparo que el cancerbero galo envió a córner. Y a continuación fue de nuevo el portugués quien disparo tras el pase atrás de Achraf, pero Lloris atrapó el esférico.
No acabó ahí la primera mitad. Ambos equipos gozaron de más ocasiones. Kane tuvo la primera en el 40’, pero Ramos evitó el gol en su remate ante Casilla. Respondió el Madrid tres minutos más tarde con un disparo de Benzema desde la frontal que paró Lloris. De forma distinta a la primera comenzó la segunda mitad. El Real Madrid jugaba más cerca del área rival y llegaba con asiduidad a la portería del Tottenham pero en una jugada de mala suerte ampliaron distancias los ingleses en el minuto 56. Disparó Dele Alli y el balón golpeó en Ramos lo justo para engañar a Casilla y superarle.
El Real Madrid no se iba a rendir y Ramos tuvo una doble oportunidad. Dier, sobre la línea de gol, evitó que un remate del capitán a la salida de un córner fuera el 2-1 y, tras el rechazo, su disparo a bocajarro golpeó en Cristiano Ronaldo en el área pequeña. Doble ración de mala suerte para un equipo que encajó el 3-0 en un contragolpe que finalizó Eriksen en el 65’. Pese a ello lo siguieron intentando los blancos y en el 80’ redujo distancias Cristiano al aprovechar un rechazo dentro del área. Incluso pudo firmar el doblete en un disparo que atrapó Lloris con problemas cinco minutos más tarde. El Real Madrid sigue dependiendo de sí mismo para clasificarse para octavos.
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