Desde el primer minuto, la Juventus se hizo dueña del partido y con el control total de la pelota dominó a un Cesena que viajó hasta Turín con la única intención de defenderse y rescatar un punto.
Sin Tévez, pero con el tucumano Roberto Pereyra entre los titulares, el equipo de Allegri, con mucha paciencia, tocó y tocó la pelota ante uno de los equipos más débiles del torneo y generó peligro desde el comienzo. Pudo haber abierto el marcador a los 10 minutos con un disparo de Giovinco, pero el arquero visitante tapó el remate. De cualquiera forma, la ventaja no tardó en llegar. Tan solo seis minutos después de la jugada del italiano, el árbitro cobró un penal por una mano de Cascione dentro del área y el chileno Arturo Vidal lo transformó en gol.
A partir de ahí, todo se hizo más fácil para la Juve. Con la ventaja jugó aún más tranquilo de lo que lo venía haciendo y controló el partido a su antojo. El Cesena intentó salir un poco pero dejó en evidencia las pocas armas para generar juego que tiene y, salvo un remate desde fuera del área, no llegó al área de la Vecchia Signora.
En la segunda parte el trámite no cambió mucho. Los bianconeros se plantaron en campo contrario y el Cesena, por mérito rival o incapacidad propia, casi nunca cruzó la mitad de la cancha. A los 63', Vidal capturó una pelota dividida en la medialuna y, de derecha, la puso junto a un palo para decretar el 2-0 para los de Turín. Con la obra completada, el chileno fue reemplazado minutos después por Padoin. A cinco del final apareció Lichtsteiner para estirar aún más las diferencias en un partido que hacía rato ya no era tal.
La Vecchia Signora sigue con su andar firme en la Serie A, en la que cosechó cuatro victorias en igual cantidad de partidos, y se mantiene en la punta de la tabla junto a la Roma, que ganó en su visita al Parma.
0 comentarios:
Publicar un comentario