¿Sobredosis de clásicos?

Podrían disputarse hasta cuatro enfrentamientos a vida o muerte entre el Barcelona y el Real Madrid en el caso de que ambos equipos logren acceder a las semifinales de la Champions League.

Si los blaugrana superan la resistencia del Shakhtar Donetsk y los madridistas hacen lo mismo con el Tottenham Hotspur, las aficiones de los dos eternos rivales deberán controlar sus pulsaciones.


De hecho, antes del primer duelo seguro entre Barça y Real Madrid ya se sabrá si se verán las caras en la Champions, ya que la vuelta de los cuartos de final tendrá lugar los días 12 y 13 de abril. Y ese sábado, en principio a las 22.00 horas, el líder de la Liga visitará el Bernabéu en la 32ª jornada liguera con el recuerdo del humillante 5-0 del Camp Nou.


Sin el más mínimo respiro, Barça y Real Madrid se medirán el miércoles 20 de abril en Mestalla en la final de la Copa del Rey por primera vez desde la campaña 1989/90.


Tras dilucidarse el torneo del KO y con la Liga quizá ya decidida, la moral de ambos equipos podría ser antagónica caso de que el ganador de la Copa del Rey ocupe también la primera posición en el torneo de la regularidad. Ese estado anímico resultará muy importante de cara a la jornada de Liga situada justo antes del partido de ida de las hipotéticas semifinales de la Champions League, la número 33, en la que el equipo que dirige Pep Guardiola recibirá en el Camp Nou a Osasuna y el conjunto dirigido por José Mourinho regresará a Mestalla para enfrentarse al Valencia.


Si superan los cuartos, FC Barcelona y Real Madrid volverían a medirse el miércoles 27 de abril en el Bernabéu, en la ida de la penúltima ronda de la máxima competición europea. El choque supondría el tercer enfrentamiento entre los dos grandes estandartes del fútbol español en únicamente 11 días. Y aún habría más, ya que el encuentro de vuelta se disputará solo seis días más tarde en el Camp Nou (el día 3 de mayo); es decir, cuatro clásicos en 20 días. Entre la ida y la vuelta, el Barça jugará en Anoeta contra la Real Sociedad y el Real Madrid, en su feudo contra el Real Zaragoza.


Sin duda, la mayor densidad de clásicos de la historia y una prueba de fuego para los corazones de barcelonistas y madridistas.

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