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El fútbol da revanchas, y el Liverpool tuvo la suya tras vencer 2-3 al Leicester City el sábado en un partido de grandes emociones en el King Power Stadium. Apenas cuatro días después de quedar fuera de la Carabao Cup a manos de los foxes, el conjunto de Jürgen Klopp se vengó en la Premier League con goles de Mohamed Salah, Philippe Coutinho y Jordan Henderson.
Los reds salieron con siete cambios en el once titular, pero la transformación más evidente fue la mejoría de su pegada. Primero avisó Emre Can con un remate que se estrelló en el poste, dejando un rebote que Salah no pudo aprovechar. El egipcio no volvió a perdonar y sólo dos minutos más tarde, a los 15’, cabeceó a gol un gran centro al segundo palo de Coutinho. El volante brasileño volvió a hacer maravillas con su pierna derecha al minuto 23, esta vez clavando un espectacular tiro libre desde 25 yardas que hizo inútil la estirada de Schmeichel. Todo iba bien para el Liverpool, hasta que el Leicester descontó con algo de polémica. Se jugaba el tercer minuto de tiempo agregado antes del descanso (el cuarto oficial había señalado dos) cuando el juez ignoró una falta de Okazaki sobre Mignolet en un saque de esquina, permitiendo al japonés acortar distancias.
Los reds respondieron en el segundo tiempo, ejecutando una contra a la perfección con un gran servicio del suplente Daniel Sturridge para Henderson, autor del tercer gol visitante a los 68’. Sin embargo, no todo estaba resuelto, ya que Vardy volvió a descontar para los dueños de casa apenas un minuto después. El Leicester tuvo el empate en los pies de su goleador, pero Simon Mignolet se hizo gigante para atajar el penalti de Vardy y mantener la ventaja 2-3 en el marcador. Y de esta forma terminó el partido, un triunfo sufrido pero merecido de los reds.
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