Exhibición blanca en Los Ángeles

El Real Madrid cumplió con lo que vino a hacer en este partido. Ganó con contundencia y lo hizo, además, dando espectáculo a los más de 30.000 espectadores que acudieron al Home Depot. Los de Mourinho fueron muy superiores pero no se dejaron ir y mostraron un repertorio de fútbol, pases, toques y remates que dejaron feliz a todo el mundo. La gira del Real Madrid en EE UU no puede empezar de mejor manera. Goleando y emocionando a la gente. Y es que el estadio de los Galaxy parecía un pequeño Bernabéu lleno de camisetas y banderas blancas.

El Real Madrid arrancó en Los Ángeles con el primero de los cuatro amistosos que va a jugar el equipo de Mourinho en EE UU. El técnico apostó por un 4-2-3-1, con Higuaín como delantero centro. En el doble pivote Alonso y Lass y una línea de tres formada por Kaká, Callejón y Di María. Los blancos dejaron claro desde el pitido inicial que querían llevarse el triunfo y, además, hacerlo con goles y divirtiendo a la gente que casi llenaba el Home Depot para verlos. En el 2’ pase en profundidad de Di María que Higuaín recoge en el área para batir con tranquilidad a Saunders. 0-1. Un minuto después Di María pudo marcar pero su vaselina se marchó alta. Los de Mou se imponían con autoridad a unos Galaxy que oponían poca resistencia. Así en el 11’ iba a llegar el 0-2. Di María, motivado todos los minutos que disputó, controlaba un balón en la frontal y con total comodidad batía de fuerte disparo al meta angelino. 

Parecía que los blancos ya habían sentenciado el partido en menos de un cuarto de hora y que tocaba divertirse y disfrutar. Pero no fue así. Con todo perdido los norteamericanos se lanzaron al ataque y en el 19’ pudieron acortar distancias por medio de Robbie Keane, pero Albiol tapó bien su disparo. En el 22’ iba a llegar el 1-2. Beckham pone una buena falta al segundo palo, toca González y Lopes empuja en la línea de gol. Los Galaxy volvían a meterle emoción al partido. Se lo creyeron y se fueron arriba en busca del empate, pero es peligroso con este Real Madrid. En el 35’ una contra llevada por Higuaín y Kaká acaba con el balón en los pies de Callejón, que bate de tiro cruzado a Saunders. 1-3 y los blancos volvían a meter distancia en el marcador. El canterano hacía su tercer gol esta pretemporada. 

En el 38’ Casillas metía una mano salvadora que evitaba el segundo gol de los americanos. El partido era de ida y vuelta y las ocasiones se sucedían. En el 40’ Mourinho hizo su primer cambio y metió en el campo al canterano Alex por su hermano Nacho. En el 43’ Higuaín pudo hacer el 1-4 pero entre el portero y un defensa le sacaron el balón en el último instante. Sin más se llegó al descanso.

La segunda mitad comenzó con un Real Madrid totalmente renovado. Once jugadores nuevos saltaron al campo. Fue el turno para Adán, Pepe, Ramos, Arbeloa, Morata, Sahin, Khedira, Ronaldo, Özil, Granero y Benzema. Pese al carrusel de cambios en ambos equipos al partido no le costó entrar en ambiente. En el 48’ Granero mete un excelente pase en profundidad a Morata, que controla dentro del área y bate con inteligencia al meta del Galaxy. 1-4 y el Madrid seguía haciendo disfrutar a la grada, que se divertía con el juego de los blancos haciendo la ola. Los madridistas eran los dueños absolutos del partido ante unos Galaxy que acusaron mucho más la rotaciones que los de Mourinho. 

Cristiano Ronaldo, que provocaba el delirio de la grada con cada acción, lo intentó en el 63’ con un disparo lejano pero se marchó desviado. Los blancos sacaron a relucir lo mejor de su repertorio con taconazos, pases y controles que emocionaron a un público que lleno el Home Depot y que batió el récord de asistencia con 30.317 espectadores. De hecho, el meta Perk se convirtió en el mejor jugador de los Galaxy salvando a su equipo de tres ocasiones clarísimas de gol a pies de Morata, Benzema y Özil. Los minutos pasaban y en el 80’ Mourinho hizo sus dos últimos cambios. Jesé y Jesús entraron por Morata y Adán. Y el delantero, en el primer balón que tocó, lo metió en la portería tras una sensacional jugada de Özil y Benzema en el 83’ de juego. Como colofón la gente pedía un gol de Cristiano y el portugués lo intentó hasta el final, pero la mala suerte y el portero lo impidieron. Así se llegó al final del partido con el objetivo cumplido: goleada y espectáculo para que todo el mundo se fuese contento a casa.

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