El Ajax de Ámsterdam tiene el equipo más ilusionante de los últimos veinte años. El conjunto de Erik ten Hag maneja un elenco de jugadores de mediocampo hacia delante que es digno representante de la esencia ajacied de toda la vida. Un equipo que tiene en su haber nada menos que cuatro Copas de Europa, y que se encuentra un poco oxidado en cuanto a eliminatorias europeas. Por fin han conseguido volver a tener una buena generación de jugadores que respondan a las exigencias de la máxima categoría. Jóvenes cómo De Jong o De Light están llamados a ser referentes en el futuro (y presente), en sus puestos cómo estrellas del fútbol. De hecho, De Jong jugará a partir de la próxima temporada en el Barcelona.
La excesiva juventud es quizá uno de los mayores problemas de este Ajax que tanto ha maravillado durante la fase de grupos, pues quizá les falten varios jugadores de calidad con verdadera experiencia en encuentros así, para guiar a los más jóvenes. Erik Ten Hag, entrenador del conjunto blanquirrojo, ha estado utilizando durante toda la temporada una especie de 4-3-3 o 4-2-3-1, en función de como se quiera ver a los extremos de adelantados en tareas defensivas, con De Light cómo líder de la zaga, acompañado por Blind. De Jong es la brújula del equipo, se encarga de llevar la batuta con el balón y ser el motor del equipo en la creación de juego. Lo habitual es que le acompañe Schöne en el centro del campo, aunque en una función un poco más defensiva.
En ataque, las grandes bazas son Zayech y Tadic. El primero está jugando más escorado a una banda, aunque también puede hacerlo cómo mediapunta. Por último, como delanteros centros se encuentran el veterano Huntelaar, con pasado madridista y Dolberg que está rindiendo por debajo de lo esperado.
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