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La Juventus es primera en el grupo de Champions y ésta es la buena noticia de la noche, pero se debe al resultado de Mestalla, donde el Valencia ha ganado al Manchester United. Los bianconeros tienen que dar las gracias a los españoles porque con su 2-1 ante los ingleses la derrota de Berna, con el mismo marcador, es indolora. Contra todo pronóstico la Juve pierde en Suiza ante el Young Boys, que supo aprovechar los contragolpes y, sobre todo, el factor campo.
El frío y el estado del terreno de juego ya eran una complicación para los bianconeros, que para no correr riesgos empezaron con Chiellini en el banquillo y Cancelo en la grada. Allegri puso a Cuadrado de lateral y a Douglas Costa y Bernardeschi de extremos en un 4-4-2 con Ronaldo y Mandzukic como puntas. La Juve empieza mandando pero en el minuto 23 Allegri tiene que sustituir a Cuadrado por Alex Sandro, si bien las ocasiones seguían, con dos claras de Ronaldo y Douglas Costa. Pero el Young Boys juega con personalidad espoleado por su público, y aprovecha los errores de los bianconeros. Así, a la media hora, Alex Sandro comete penalti sobre Mumi Ngamaleu, que se encarga de transformar Hoarau.
La Juve trata de reaccionar antes del descanso pero no encuentra el gol. No baja la intensidad tras regresar de los vestuarios, con un disparo al larguero de Pjanic. El juego se desarrolla casi en su totalidad en el campo suizo, pero la velocidad de contragolpeo del Young Boys no para de crear problemas y, como consecuencia, Hoarau aprovecha uno de ellos para hacer el segundo y batir a Szczesny. Allegri busca ponerle remedio y cambia a Pjanic por Emre Can y a Dybala por De Sciglio. A los ocho minutos de su entrada, la Joya anota con un disparo imparable tras recibir un balón de Ronaldo.
Los bianconeros se lanzan al ataque para lograr el empate. Y de hecho estuvo a punto de llegar con un golazo de Dybala, que fue anulado por fuera de juego de Ronaldo. Victoria suiza y la Juve sufre su segunda derrota de la temporada tras la encajada en casa contra el United. Como aquella, 2-1 para los rivales pero, sobre todo, tampoco hace daño. Si acaso al orgullo...
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