No se abre el candado

Un empate sin goles en el que sólo la Juve ha dado la sensación de querer ganar el partido. Lo hubiera podido lograr con un poco más de puntería ante la portería contraria pero hay que dar también mérito al Inter por su partido tenaz y por sus buenos mecanismos defensivos. Lástima, porque durante gran parte del partido los bianconeros dan la impresión de poder ganar pero, un poco Handanovic, y un poco los errores propios le impiden lograr los tres puntos.

Allegri renuncia a Dybala y recupera a Mandzukic para jugar arriba con Higuaín y Cuadrado. Y el croata tiene una doble ocasión en el 9’. El comienzo del choque es atractivo, con ritmo alto aunque las defensas se imponen. Icardi e Higuaín tocan pocos balones y para ver ocasiones tienen que aparecer los centrocampistas como en un remate de Khedira que desvía Handanovic. Y cuando no interviene el portero nerazzurro, el larguero salva a los de Spalletti como en un remate de Mandzukic a centro de Cuadrado poco antes del descanso.

Los centros del colombiano para el croata siguen siendo el arma principal de los bianconeros también en la segunda parte, pero falla el remate final. Handanovic detiene los remates de Mandzukic e Higuaín cuando la mejoría de Pjanic hace que la Juve llegue con más facilidad. Los bianconeros dominan y vuelven a tener ocasiones de Khedira y Asamoah. Pero como el gol no llega, Allegri cambia el sistema con la entrada de Dybala por Khedira, pasando al 4-2-3-1. Pero el Inter sigue muy equilibrado y, pese a los esfuerzos, la Juve no puede pasar de un empate que permite al Inter -al menos de momento- mantener el liderato.

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