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La Juventus empezó la nueva temporada con buen pie al imponerse por 2-1 a la Fiorentina. Los tantos de Sami Khedira y Gonzalo Higuain neutralizaron la diana de Nikola Kalinic y un equipo con muy poca pegada.
Khedira avisó pronto. A los cuatro minutos, el alemán recogió un balón en el área pero su disparo se fue por encima del larguero. La Juventus empezaba con ritmo y mucha llegada pero el sacrificio de la Fiorentina les permitía resistir. A pesar del dominio, la primera media hora pasó sin remates a puerta y los viola no estaban incómodos con el planteamiento del partido. Pero todo cambió con el gol de Khedira. El alemán remató a la perfección un centro de Alex Sandro y rompió el encuentro.
En la segunda mitad, siguió el partido tosco y con poco ritmo. La Juve no creaba pero no veía amenazada su portería. Las aventuras en solitario de Kalinic eran insuficientes para los visitantes. Sin embargo, a balón parado llegó el empate. Fue el delantero croata quien remató un saque de esquina botado por Ilicic en el 70' y puso en jaque al campeón. Hasta que Gonzalo Higuaín justificó su fichaje. El argentino, que había entrado apenas 10 minutos antes, volvía a poner a la Juve por delante con un remate con poco ángulo tras el rechace de la defensa al disparo de Sami Khedira.
En el tramo final, los intentos de Bernardeschi y Kalinic fueron en vano y Lemina estuvo cerca de sentenciar el choque antes del pitido final. Primer partido y primera victoria para una Juventus que busca seguir haciendo historia en Italia.
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