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Tocó sufrir hasta el último segundo pero pocos equipos son tan fiables como el Real Madrid en una final de la Copa de Europa. Pese a jugar prácticamente toda la prórroga sin cambios y con Bale, Cristiano Ronaldo y Modric visiblemente tocados, los blancos, dos años después de vencer también al Atlético en Lisboa, recuperaron su hegemonía continental y alzaron la Undécima al cielo de Milán tras un partido épico, sin tregua y que se decidió en la tanda de penaltis.
Desde el inicio se vio a los blancos concentrados, unidos en la lucha por un objetivo común. Cerca estuvieron de marcar en el minuto 6, pero Oblak salvó a su equipo en un remate de Benzema desde el área pequeña tras una falta sacada por Bale. No pudo hacer lo propio nueve minutos más tarde. El gol, de Ramos como en Lisboa, llegó también a balón parado. Kroos puso el balón en juego, Bale lo peinó y el capitán madridista lo llevó a la red adelantándose a la defensa rojiblanca. Pese al tanto, el Atlético no varió ni un ápice el guion con el que saltó al césped. Se limitaba a esperar un fallo para penalizar a un rival que se estaba mostrando muy compacto y sin apenas fisuras. Pocas ocasiones más se pudieron contabilizar desde ahí hasta el descanso salvo un par de tímidos disparos de Griezmann que apenas pusieron en aprietos a Keylor Navas.
Mucho más movida comenzó la segunda mitad. A los dos minutos del inicio, Clattenburg señaló penalti en un derribo de Pepe sobre Torres, pero Griezmann mandó el balón al larguero desde los once metros. Pese al susto, todo seguía igual aunque en el 52’ Zidane se vio obligado a sustituir al lesionado Carvajal y dar entrada a Danilo en su lugar. Los minutos transcurrían y jugaban a favor de los blancos, que cerca estuvieron de ampliar distancias en el 70’. Clarísimo fue el mano, algo escorado, del que dispuso Benzema tras un gran pase de Modric, pero Oblak estuvo acertadísimo y evitó el tanto madridista. Igual de clara fue la oportunidad que tuvo Bale en el 78’. Savic salvó bajo palos.
Un minuto después empataron los hoy visitantes. Juanfran centró desde la derecha y Carrasco marcó a placer. Todo igualado y once minutos para el final. La prórroga era inminente. Había que disputar 120 minutos para conocer al campeón y el Real Madrid se mostró dominador en el inicio de ese periodo. La primera jugada de peligro fue suya. Isco sacó el córner en el 94’ y el remate de Cristiano Ronaldo terminó en las manos de Oblak. No hubo muchas más ocasiones en la primera parte de la prórroga. Tampoco en la segunda salvo un lejano disparo de Casemiro en el 107’.
Todo se decidiría en la tanda de penaltis. El momento clave llegó cuando Juanfran, en el cuarto lanzamiento del conjunto rojiblanco, estrelló su disparo en el palo. Cristiano Ronaldo, como hicieran con anterioridad Lucas Vázquez, Marcelo, Bale y Ramos, no falló desde los once metros y dio al Real Madrid una nueva Copa de Europa. La Undécima ya es nuestra. ¡Enhorabuena!
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