El Liverpool desperdició una ventaja de dos goles y tuvo que conformarse con un empate 2-2 en casa del West Bromwich Albion. Danny Ings volvió a anotar después de 930 días y Mohamed Salah igualó un récord goleador de la Premier League, pero los reds se descuidaron en los minutos finales, encajando tantos de Jake Livermore y el venezolano Salomón Rondón para quedarse con un punto cuando todo indicaba que iban a sumar de tres.
De hecho, sólo cuatro minutos tuvieron que pasar para que los hombres de Jürgen Klopp se adelantaran en el marcador del Hawthorns. Gran jugada por la izquierda de Sadio Mané, cuyo centro al área complicó a la defensa local y le permitió a Ings fusilar de zurda al portero Foster. Tras dos años y medio, el delantero finalmente pudo volver a celebrar un gol. Y casi tuvo el segundo al filo del descanso, pero esta vez Foster le ganó la partida en el mano a mano.
Al minuto 72 apareció el infaltable Salah con una gran definición a pase de Alex Oxlade-Chamberlain para gritar su 31er gol en 38 partidos de Premier League, igualando la marca histórica de Alan Shearer (1995/96), Cristiano Ronaldo (2007/08) y Luis Suárez (2013/14). Parecía partido resuelto, pero Livermore acortó distancias a los 79’ y luego Rondón puso el 2-2 definitivo con un buen cabezazo a dos minutos del final. Sin dudas, un punto amargo para el Liverpool.
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