Llega el primer empate

La Juventus no pasa del empate ante el Udinese. Algo que no sucedía desde hace 38 partidos y que vuelve a demostrar que ningún partido es fácil en el campeonato italiano. El 1-1 firmado por Zapata y Bonucci en realidad da más valor a los bianconeros y a cómo saben superar las trampas que se le tienden, como la presión y los contragolpes de hoy del Udinese.

Entre la agresividad y el orden del rival, el poderío físico de Zapata y el campo pesado, la Juve se encuentra con un partido difícil. Llegan remates de Pjanic y Dybala por un lado y de Fofana y Zapata de otro. Y en el 37’, el colombiano logra adelantar a los suyos con un disparo cruzado desde la izquierda que pasa entre las piernas de Buffon y permite al Udinese llegar por delante en el marcador al descanso.

Y la reanudación empieza igual, con los locales jugando a un ritmo muy alto e impidiendo salir a la Juventus, por lo que Allegri realiza pronto el primer cambio: Benatia por Chiellini. Con muchas dificultades para crear ocasiones, en un balón parado la Juve encuentra el empate. Dybala bota la falta y Bonucci remata de cabeza.

Poco después, Danilo está a punto de marcar el 2-1 pero su cabezazo se estrella en el palo. Entra Pjaca por Cuadrado, la Juventus sufre los contragolpes locales y al final entra Rincón por Dybala. Acaba 1-1, resultado justo, que no permite aprovechar por completo la posibilidad de distanciarse en la clasificación pero sí de sumar un +8 sobre la Roma. Una distancia que, en marzo, no es poca cosa…

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