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El Liverpool y el Girondins de Bordeaux comenzaron su andadura en la temporada 2015/16 de la UEFA Europa League con un empate 1-1 en su primer partido del Grupo B.
Los reds afrontan esta campaña europea buscando volver a viejos fueros y llegaron a Francia con una plantilla renovada en su convocatoria para intentar sumar su primera victoria del grupo en un campo complicado. Philippe Coutinho, una de las principales figuras del equipo de Merseyside, fue el primero en avisar con un disparo desde la frontal del área que se fue rozando el palo izquierdo del portero Cédric Carrasso a los cinco minutos.
El Burdeos se acopló y llegó con peligro a la portería del cuadro inglés en el 10'. El uruguayo Diego Rolán aprovechó buen un centro a la espalda de la defensa para internarse en el área, pero su intento de vaselina a la salida de Simon Mignolet se perdió por encima del larguero. El transcurrir de los minutos le vino bien al Girondins, que volvió a inquietar a los ingleses, esta vez con un remate de Wahbi Khazri que se fue desviado.
Los locales, asentados en el campo, se hicieron con el dominio del choque frente a un Liverpool que no encontraba el hilo conductor entre el centro del campo y su frente de ataque. Al filo del descanso Khazri volvió a hacerse notar en el ataque galo, pero su definición tras una jugada personal se encontró con un Mignolet bien posicionado en su portería. Acto seguido, cuando mejor estaban los hombres de Willy Sagnol, Coutinho sacó un zapatazo desde la frontal que se estrelló con la madera en una de las pocas oportunidades de los reds en la primera mitad.
El paso por vestuarios dio una bocanada de aire fresco al Liverpool, que salió con las ideas más claras en la segunda parte. Coutinho reclamó más protagonismo con el balón y guio los ataques visitantes. En esas, un pase suyo al interior del área para Adam Lallana casi termina en el primer gol, aunque el meta Carrasso respondió con una buena parada. Sin embargo, la igualdad no duró mucho. Una genialidad de Lallana acabó en el primer gol de los visitantes. Un caño y un tiro ajustado al palo le dieron la ventaja al cuadro de Rodgers, que había salido mejor en el segundo acto.
El guión del choque parecía destinado a una igualdad máxima y cuando parecía que los visitantes se llevarían la victoria, el brasileño Jussiê empató el partido aprovechando un balón suelto en el área.
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