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El Liverpool logró tres puntos importantísimos este martes en su visita al King Power Stadium, donde los reds lograron remontar el partido gracias a los goles de Adam Lallana, Steven Gerrard y Jordan Henderson.
Hizo Mignolet todo lo posible para que el Liverpool comenzara perdiendo el encuentro. Primero, ante la presión de la delantera local, el portero le dio el balón a Cambiasso, que falló inexplicablemente a puerta vacía. Tres minutos después, sobre los 22', el meta belga hizo el autogol con el que se adelantaron los locales. Claro que aquí no lo ayudó la suerte: Ulloa remató al poste y el balón dio en la espalda del guardameta antes de convertirse en el 1-0. Cuatro minutos tardó el equipo de Brendan Rodgers en igualar la contienda: Lallana aprovechó las indecisiones de la defensa local para despejar un balón que no llevaba peligro para batir a Schmeichel. Tras una primera parte aburrida, se iban al descanso con empate en el luminoso.
En la segunda parte apareció el símbolo del Liverpool, Gerrard, para cambiar el rumbo del encuentro. El capitán abrió el cuero para Sterling, que volvió a centrar un balón que no pudo despejar Morgan. Allí aparecería el ídolo red, en el medio del área, para definir de primeras y firmar la remontada sobre los 54 minutos. El propio Morgan sellaría una noche nefasta yéndose expulsado al 63'.
Sobre el final, al minuto 83, Schmeichel no pudo retener un balón sencillo y Sterling cedió de tacón a Henderson, que no perdonó y estableció el 1-3 definitivo.
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