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El Real Madrid continúa imparable en el excepcional final de 2014 que está firmando y ante el Celta, que ganó en el Camp Nou y empató en el Calderón, aumentó a 18 su histórico registro de victorias consecutivas. Ningún reproche se le puede hacer a un equipo solidario, sacrificado, con una calidad brutal y que juega un fútbol elogiado por todos. Si a eso le añades a Cristiano Ronaldo, el mejor jugador del mundo, te encuentras con una combinación que está haciendo historia.
Con ganas de demostrar desde el inicio la condición de líder que ostenta desde la décima jornada, el Real Madrid salió dominador. Ramos, en su partido 300 en Liga, estuvo cerca de adelantar en el 10’ a los locales. El segundo capitán no acertó con la portería en el balón suelto que dejó Sergio al rechazar un cabezazo de Ronaldo tras el córner que sacó Kroos.
Tres minutos más tarde fue Jonny quien evitó el tanto madridista. La contra fue fulgurante. La inició Benzema, la continuó James y el providencial despeje del defensa local impidió al portugués rematar de primeras en boca de gol.
Eran los mejores minutos de los locales, que levantaron al público de sus asientos en el 17’. Illarra centró al segundo palo y Cristiano Ronaldo se inventó una acrobática chilena que rozó el larguero de la portería visitante. La belleza del recurso mereció mejor final. Diez minutos más tarde fue de nuevo protagonista. El pase de 30 metros fue de Marcelo, pero el portugués, que bajó el balón con el pecho y remató a bote pronto, se encontró con un inspirado Sergio.
El dominio local era abrumador. Tanto que en media hora habían disparado ocho veces por ninguna de su rival. Y el merecido premio llegó en el 35’. Cristiano Ronaldo cayó derribado en el área por Jonny cuando iba a rematar un centro de Marcelo y el luso transformó la pena máxima. Ya encadena 17 partidos de Liga marcando en el Bernabéu. Así se llegó al descanso de una primera parte vibrante y sin tregua.
Imbatidos en cuatro de los cinco últimos partidos
El Real Madrid salió dispuesto a resolver el partido ante un rocoso Celta que estaba demostrando su valía a domicilio. Arbeloa tuvo que sustituir a James, que se marchó con molestias a los siete minutos de la reanudación, y en el 65’ ampliaron distancias los blancos. El tanto lo firmó de nuevo Cristiano Ronaldo, que aprovechó un erróneo despeje de Cabral para batir a Sergio de volea.
No se detuvo ahí el portugués, que firmó un nuevo hat-trick. Marcelo centro en el 81’ y Ronaldo no falló con la izquierda para convertirse en el jugador que ha anotado tres o más goles en mayor número de partidos de la historia del campeonato. Espectacular Cristiano, que acumula 23 tantos en Liga, y también el equipo. Ya acumula 18 victorias consecutivas y ha terminado imbatido en cuatro de los cinco últimos encuentros.
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